EL SEÑOR ES MI PASTOR, NADA ME FALTA.

La liturgia de la palabra de este domingo IV de cuaresma nos recuerda que debemos reforzar nuestra opción fundamental, debemos rebautizarnos en un evangelio que nos trae el hombre nuevo y olvidar al hombre viejo.

Por qué formamos una sociedad que no ve ni quiere ver lo que realmente pasa a nuestro alrededor, apoyamos unos valores que son ciegos, que realmente son unos contravalores que no nos llevan a ninguna parte y menos aun al camino del evangelio. Estos son los ciegos que el evangelio hoy nos expone.

No debemos desvirtuar los valores que Jesús nos trae, él nos habla de un evangelio nuevo, de una forma diferente de ver el mundo, de ver al prójimo. En definitiva, de ver al ser humano como valor supremo.
No hay ley mayor que el amor hacia los demás, por ello, el seguir el sentido de la cruz es el verdadero camino de la vida, la cruz no es el fin sino el principio del nuevo mundo. Somos hijos de la luz, somos hijos del evangelio.

Que esta Cuaresma nos sirva para decir SI al evangelio de Cristo y a vivir con un corazón rebosante de caridad y amor hacia los demás. Sin caridad nada somos.

MATER MEA

María, la madre de todos los cristianos, toma un papel primordial en la Cuaresma, como así lo tuvo durante toda la vida de su hijo. Ella, la siempre entera, permaneció al lado de Cristo en los momentos mas cruciales de su pasión, muerte y resurrección. 

Simeón con su profecía "Y a ti una espada te atravesará el alma, a fin de que queden al descubierto  las intenciones de muchos corazones" (Lc 2, 34-35), nos anuncia el sufrimiento de una madre que ve morir a su hijo para redención de todos los mortales. Con su muerte, muere el hombre viejo y nace el hombre nuevo.

María, modelo de Fe y madre de la Iglesia, es el símbolo vivo de la palabra de Dios, ella supo decir SI al evangelio de Cristo, supo romper barreras y ver en Dios el camino de la salvación.

Que esta Cuaresma, contemplemos a María como modelo de vida y sepamos decir SI a lo que Dios nos pide, siempre desde el amor y la caridad; porque sin CARIDAD nada somos

CUARESMA 2014

"CONVERTÍOS Y CREED EN EL EVANGELIO"

Comenzamos la Cuaresma, un tiempo que nos llama a la reflexión y a la reconversion, son 40 días donde la Iglesia nos propone una idea muy clara: ¿Hemos entendido el evangelio de Cristo? 

Nuestra vida cristiana ha de basarse en una ley única, la palabra de Dios.

El mensaje de nuestro Pontífice viene a preguntarnos si realmente nos hemos despojamos de todo lo que somos y hemos dejado entrar en nosotros a ese Jesús pobre, que dio su vida por los demás en una cruz con un simple mensaje, el AMOR.

Creer en el evangelio es creer en un mundo mejor y mas justo. No podemos olvidar al prójimo, no podemos olvidar la pobreza social, la injusticia política, así como tampoco podemos olvidar el rechazo social hacia los que mas sufren. 

Que esta Cuaresma que hoy empieza, nos sirva para cambiar esquemas sociales y luchar por la PAZ y la justicia.

Que San Julián y nuestra madre, la Santísima Virgen de la Paz, nos ayuden a convertir nuestro corazón en un brasero eterno de amor y caridad, porque sin caridad nada somos.